Y por las arenas del mundo, madre Grecia,
arrastras siempre tu misma mentira
Kafenío Mouragio, 3 de enero de 2012
Ayer no te escribí y hoy no creo que lo haga mucho. Estuve enfermo; bueno, aún lo estoy. Posiblemente cogí frío y por la noche tuve fiebre. Fiebre en un hotel... ¡qué soledad!
Si llamas no te cuento nada. Ya sabes lo que pienso acerca de dar malas noticias en la distancia. Tú no podrías ayudar y yo no mejoraría. Conseguiría simplemente preocuparte y hacerte sentir impotente.
Hoy me voy de Kárpathos en un larguísimo viaje de dieciocho horas que me llevará hasta Milos. Espero afrontar el viaje con cierta mejoría. Espero que los días en Milos traigan algo mejor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario